A oidos sordos, no hay pierde.

Tu me decías y me decías. A mí se me atrofió la paciencia, se me agotó el cerebro. En Union Station a las cinco y media. Los trenes siempre están a tiempo. Súbete en el Express. No habrá lugar de despedida. Señor con carreta de súper. Una rata se me atravesó entre las piernas. ¡Lemonade, limon-aid! A solas mejor, sobretodo con el iPod puesto. Metido en la bolsita mejor dicho. Cómprate una chumpa de esas para gadgets. Tú diciendo y diciendo. Seguía sin responder. Siete en punto, cuatro martinis y a la cama. Hay que caminar. Tomemos un taxi. El bar con nombre ruso. Pravda en Lafayette. Es que ya no está de moda. Pero la Rusa está buena. Me fijé. ¿Le pondrías? Soy mujer. Para nada. Ya le puse. Me decías me decías. El cuarto oscuro. A la cama repito. Abre las piernas hombre. Yo también te quiero. Que rico olés. Que rico te huele. Sin h o con h? No es lo mismo dice un español. Se presentó en Radio City. Pero si ese no es gringo. Aquí también hay comunidad latina. Ya está adentro? Solo de ladito. De cachetío decía la canción. Ni lo noté. Agua mineral por-favor, que con cuatro Severenda y reverenda. Esa palabra no existe. Acaso la gente sabe pues? Si esta revista es hipster. Leer es hip. Sigue diciendo y cayendo. Se le calló. Te callaste? Me seguías diciendo. En el onceavo nivel suite presidencial, dos cuartos con minibar y salita. El hotel de la esquina, el que tiene nombre de letra en rojo. W? Es bien trendy dicen. Y eso que es de starwood. Ay que rico, si se viene. Que alegre que me vine. Once y media y siempre la pasamos bien. No se puede fumar adentro. Abre la ventana. Esta sellada, estamos en los U.S. Siempre hay una ranurita para sacar el humo. Es calle o avenida? Igual siempre está abierto todo. The city that doesnt sleep. Frase cliché. Un juguito de la mini-refri. Cuestan como cinco dólares. Mejor te compro una ahí enfrente. Y no que suite pues? “Ponte el saco que hace frío”. No te vistas, ya regreso. Por algo hay dos cuartos. Y si no les gusta la historia? Acaso es para que les guste. Mejor me invento una nueva. Es que de otra ya no me acuerdo. Igual no la vas a recordar.

Cjo.-

Ya no hay dolor, se desvaneció con el sudor de tu ausencia. Ese sudor que dejaba al salir de la cama, el sudor que me impregna en noches de semen. Ya no existe. El dolor tampoco. Que el dolor esta sobre estimado dicen. A mi me duele y que. El sabor de tu ausencia. El sudor de tu partida. La sangre que corre por mis piernas. La sangre, sobretodo la sangre.

Cjo.

A medio día

Cada minuto se hace insoportable, oigo la voz, la sombra se acerca, el ruido. Ruido de noche, noche silente su voz es zumbido constante en mi voz. Incertidumbre. Todo es incertidumbre, duda, sospecha. Estoy harta de esta vida. Que si se fue con las putas, que si ha ido con las putas, que si tendre alguna enfermedad que si le gustan las putas. Lo odio, lo maldigo lo aborresco. Me carcome el sentimiento negativo, el sufrimiento de volverme esta cosa cuando estoy a su lado. Lo odio, no puedo, me traspasa su falsedad. Sus mentiras me carcomen el corazon, los latidos. Todo gira a su alrededor pero nada es seguro. La maldición del día. Por lo menos en la noche me escapo tras ojos cerrados. Finjo, finjimos.

A tu lado otra vez,
Con falta de hambre
Y sobra de espacio.
En sus ojos las palomas se atontan
No existe la rigidez aparente
El silencio es la unica forma de desvanecerse.

Cjo.-

ínterim

Calor. Aun asi tengo frío. El frío viene de adentro.

Acompañada pero sola. sola salo sol los losa laso alos olas.......

a la par, su sombra.
un desconocido. un extraño.
un extraño con quien comes, hablas, ríes, duermes.
bailas, tocas, tiemblas, sudas.
gimes, te duele, te arde, lo disfrutas.
te repele, te excita, lo muerdes, lo lamentas.
lloras, gritas, te golpeas, lo golpeas.... te golpea.
vacía te quedas. drenada. insípida.
ríes otra vez. suspiras. respiras. calma.
inerte deambulas. disimulas. insomnio.
calor frío.
sudor, olor, hedor.
lágrimas,
sonriendo.

…y de nuevo, otra vez…

Cjo.-

Insistencia.-

Demasiado sola,
Demasiado lejos,
Demasiado.
A veces me pregunto porqué a ti, porqué a mi.
En este espacio vacío que compartimos,
la misma hora, el mismo gusto, el mismo tacto...
Inseguros debatimos el origen de la brisa.
Cuando es el mar quien nos une.

De instantes se cunde el miedo.
Demasiado miedo.

Hoy solo me acompaño de tu sombra
y del dolor que me arrebataron tus besos;
de la vida que me arrancaste del vientre
y del olor a rancio que dejas al salir de la cama.

Todo en demasía,
como siempre.

Cjo.-

Alfombra blanca.-

No temblé ni grité.
No pronuncié palabra alguna.
Observé eso sí, y con deleite.
Disfruté cada detalle:
Cómo el aire se te hacía mas denso, lento.-
Cómo tu piel se tornaba de un color carne a otro morado,
Tus pupilas se dilataban.
Vi tu cuerpo arrastrarse de un lado a otro, sin pedir ayuda.
Tu lo sabías.
Tus manos sudaban, tu garganta se contraía, tus pies se encogían
y el aire seguía denso.
”El veneno no tardó en hacer efecto” pensé.
Salí del cuarto, indiferente.
Allí te dejé, tullido, sobre la alfombra blanca.
No hubo testigos ni remordimientos.
Te encontraron meses después, hediondo y corroído.
Un funeral vacío en el que me tragué la risa y solté el llanto.

Cjo.